Dado el actual escenario político y económico debido a la incertidumbre generada por el conflicto comercial entre EEUU y China, la debilidad de los indicadores macro publicados recientemente en Japón, la Zona Euro e incluso EEUU, país que había venido mostrándose muy resistente a la desaceleración del crecimiento económico mundial, seguimos pensando que hay motivos para seguir apostando por la renta variable:
- Los bancos centrales han mostrado su predisposición a seguir apoyando la economía, teniendo todos ellos margen dada la benignidad de la inflación en todas sus economías.
- La renta fija, tras las últimas subidas, no ofrece atractivo alguno.
- Las valoraciones de muchas compañías no son excesivas, con algunas, incluso, siendo todavía atractivas.
- Muchos valores de corte defensivo ofrecen a precios actuales elevadas rentabilidades por dividendo.
- Seguimos pensando que ni a EEUU ni a China les interesa económica y políticamente que el conflicto comercial vaya a más, alargándose en el tiempo hasta impactar muy negativamente en el crecimiento económico de ambos países.
Es por todo ello que recomendamos no ponerse nervioso y deshacer posiciones de forma precipitada ya que pensamos que una cierta exposición a la renta variable sigue siendo adecuada en estos momentos.